No sé si fue a causa de que su regreso se produjo en pleno verano o a que el nombre de Carmen Amaya no decía mucho al gremio de la pluma pero su vuelta a España, después de poco más de 11 años fuera, pasó casi desapercibida. Salió, brevemente, en el NO-DO y Alfredo Marqueríe, que la saludó a pie de pista, le dedicó este artículo
en el ABC de Madrid.
A los pocos días vuelve a Barcelona y sus viejos admiradores la recibieron alborozados
Sempronio la entrevistó y Sebastià Gasch aprovechó el estreno de Pierna de platapara recordarnos los inicios artísticos de la genial bailaora.